Envuelta en su vestido negro, Luna sumerge la ciudad en tinieblas y penumbra. Albino quiere escapar. No puede. ¡Imposible! En cuestión de segundos se convierte en el terror de los transeúntes. Gritos, sangre, muerte... Luna al fin tiene el espectáculo que tanto le divierte y sonríe macabra mientras Albino aúlla pidiendo perdón al cielo, esperando ser absuelto de sus todos crímenes.
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Muy bueno compañera!!!!!!!!
ResponderEliminarCreo que desde ahora veré a la luna con otros ojos. Excelente.
ResponderEliminarEnhorabuena por como escribes! realmente increible :) me encanta el toque que le das
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